La North West 200 es una de las carreras más impresionantes del mundo del motociclismo. Cada mayo se dan cita en Irlanda miles de aficionados para disfrutar de su trazado de casi 15 kilómetros en forma de triángulo. Allí, los pilotos no se andan con chiquitas.
La disposición natural del trazado permite que las motos se pongan incluso a más de 300 kilómetros por hora. El riesgo es evidente, y un piloto ha estado a punto de pagarlo muy caro, pero ha sobrevivido de auténtico milagro.
Salió por su propio pie sin lesiones, solo magulladuras
Paul Cassidy ha sobrevivido a uno de los accidentes más sobrecogedores que se han presenciado en los últimos años en el mundo del motociclismo. El piloto natural de la Isla de Man se encontraba participando en la North West 200 cuando otro piloto le perturbó a causa de un problema mecánico.
El piloto no pudo hacer absolutamente nada por evitar al otro, y se fue largo. Para hacernos una idea de la magnitud del accidente, la Yamaha R1 que venía montando iba en cuarta marcha por encima de los 200 kilómetros por hora. En ese momento, perdió el control.
Tras rozar al piloto, se marcó un recto, y había un muro. Horror: salió volando siete metros y aterrizó en el jardín de una casa, encima de un coche. Las imágenes son fuertes, pero la buena noticia es que el piloto, hecho de otra pasta, se levantó como si nada y salió ileso. De hecho, se fue andando del lugar.
El parte médico es leve, a pesar del impactante golpe. Cassidy no sufre ningún tipo de lesión, más allá de alguna magulladura y hematoma a causa del forzoso aterrizaje encima del vehículo. "Subí unos siete metros pies y aterricé en el coche de alguien", narraba.
En su testimonio compartido a través de las redes sociales, el piloto habla irónicamente de una "pequeña caída". Una caída de "siete metros" cuando "estaba detrás de otro piloto y acababa de subir a cuarta marcha. Su moto se apagó en la primera curva, los comisarios dijeron eso. Se fue hacia la izquierda y luego miró por encima de su hombro izquierdo sin saber que yo le estaba pasando y chocamos", narra.
Un aficionado que se encontraba muy cerca del paso por curva grabó toda la acción en la que se puede ver perfectamente a Cassidy volando más de siete metros de altura. Y aunque corta el final, afortunadamente, sale por su propio pie del lugar.