Cuando la palabra motociclismo y Red Bull se unen en una misma frase, esta suele implicar un reto extremo. En esta ocasión también incluye a un rookie de MotoGP: Miguel Oliveira junto a su KTM han sido los protagonistas de la última experiencia de Red Bull.
Se trata de un vídeo rodado en un túnel austriaco que da al espectador sensación de velocidad y adrenalina digna de un piloto de MotoGP, además de mostrar al mundo el comportamiento del prototipo de KTM fuera de los circuitos. Eso sí, con la carretera cortada al tráfico por razones obvias de seguridad vial.
Camino al templo austriaco de la velocidad
Miguel Oliveira, de la mano de KTM y Red Bull ha sido el encargado de hacer los honores para la reapertura del túnel en los Alpes. El portugués ha entrado en el túnel a lomos de su KTM RC16.
El vídeo habla por sí solo. En la cámara on board de la montura del portugués podemos llegar a ver y oír lo que ve y oye el piloto sobre la KTM en los ocho kilómetros de distancia del túnel y sentir una mínima parte de la adrenalina que él debió sentir.
Es un túnel de ocho kilómetros de longitud situado en la autovía que lleva al templo de KTM y Red Bull: el circuito austriaco de Spielberg en el que se celebra el GP de Austria. Este 2019 en el camino a la pista austriaca los aficionados pasarán por este túnel en el que ha rodado Oliveira.
El rookie de KTM no ha perdido ocasión de elogiar al GP de Austria, que a pesar de llevar solo tres años en el calendario ya se ha convertido en un Gran Premio especial por su trazado que brinda unas carreras espectaculares. Además ha confesado que al ser un piloto KTM, para Oliveira el GP de Austria es lo más parecido a correr en casa.
Así ha expresado el portugués sus sensaciones en su aventura en el Gleinalm: "Rodar en el túnel ha sido una experiencia diferente, hacerlo con los Alpes de fondo es increíble pero el sonido del motor dentro del túnel es muy especial y genera adrenalina aunque no vayas rápido".