A priori, Yamaha es una marca que ya no debería preocuparse por el loco mercado de pilotos de MotoGP de cara a 2023. Tienen confirmados como pilotos titulares a Fabio Quartararo y a Franco Morbidelli para la próxima temporada, y se han quedado sin equipo satélite, ya que el RNF Racing se fue con Aprilia.
Sin embargo, hay una bomba que podría estallar, revolucionando de nuevo el mercado de MotoGP. Ciertos rumores en el paddock apuntan a que Franco Morbidelli podría bajarse motu proprio de la Yamaha, abriendo de nuevo el mercado de pilotos no solo para la marca de los diapasones, sino para todas las demás.
Yamaha no prescindirá de Morbidelli, pero el italiano podría renunciar motu proprio
Lo que está claro es que no será Yamaha quien prescinda de Morbidelli. En Iwata respetan el piloto que tienen firmado con su piloto, especialmente porque romperlo sería un gasto económico importante sin garantías de que el recambio fuese a mejorar los resultados de Morbidelli. Además, hay intereses políticos implicados.
No olvidemos que es muy probable que para 2024 Yamaha recupere su equipo satélite de la mano del VR46, y precisamente Morbidelli es piloto de la academia de Valentino Rossi. Sería un feo al posible futuro socio cargarse a su pupilo aún con contrato. Sería una salida más natural la de que Morbidelli bajase al VR46 en 2024.
Sin embargo, los rumores del paddock apuntaron antes del parón del verano a que podría ser el propio Morbidelli quien se baje de la moto voluntariamente. Sus problemas en la rodilla persisten, y no termina de adaptarse a una moto muy diferente a la Yamaha de 2019 con la que corrió tanto tiempo.
De hecho, es el único piloto reciente de Yamaha que se queja de que la moto tiene demasiado agarre. No hemos visto casi ningún progreso a lo largo del año, así que no sería descartable que Morbidelli se baje de la moto para, como mínimo, tomarse un año sabático, recuperar plenamente la rodilla y resetear la mente. Solo tiene 27 años.
Si sale Morbidelli para Yamaha se abriría todo un mundo de posibilidades. La más lógica podría parecer la de tirar de Toprak Razgatlioglu, que está deseando correr en MotoGP con el equipo oficial. Recientemente hizo un test, pero parece muy difícil. Joan Mir, si se trunca lo de Honda, y Raúl Fernández, previo pago a KTM, también serían opciones.
Por cierto, que quizá Yamaha tenga que afrontar un mini mercado durante la propia temporada 2022, ya que Morbidelli no es el único que piensa en bajarse de la moto. También Andrea Dovizioso le está dando vueltas al asunto de retirarse ya, antes de acabar el 2022, lo que forzaría a Yamaha a buscar a alguien. Probablemente, a Cal Crutchlow, el probador.