Valentino Rossi participó en el pasado Gran Premio Movistar de Aragón tras su grave lesión producida pocas semanas antes y que le llevó a pasar por el quirófano para fijar su tibia y peroné. Sin embargo, el nueve veces Campeón del Mundo contó con una ayuda especial para poder soportar físicamente la dureza de la cita aragonesa.
Esta ayuda no fue otra que la que le brindó el sistema de freno trasero accionado por el pulgar que Yamaha montó en la M1 de Valentino Rossi. En su estado físico y con la lesión en su pierna derecha, la del pie encargado de accionar el freno trasero, esta misión podía ser bastante complicada para el astro italiano. Aparte de no contar con la movilidad necesaria para tener un tacto idóneo con el pie, el dolor que llevar a cabo esta acción le podía provocar fue suficiente para tomar esta decisión.
Valentino Rossi se une a la moda del freno trasero en la mano
Sin embargo, esta no fue la primera vez que Valentino Rossi utilizaba este sistema que cada vez es más común en los pilotos de MotoGP y otras categorías. El de Tavullia ya había usado el freno trasero de mano en Brno, pero en esa ocasión lo hizo con el tipo más común. En la República Checa, el freno trasero de la M1 de Rossi podía ser activado o bien con la mano izquierda o bien con el pie derecho, pero no de manera simultánea.
Para su retorno a la competición en el trazado aragonés, Valentino pidió que fuesen dos circuitos hidráulicos independientes. De esta manera, Rossi podría frenar con el pie hasta una cierta presión y ayudarse para dar esos últimos bares con el pulgar de la mano izquierda.
En cualquier caso, viendo el sorprendente rendimiento que el 46 mostró en MotorLand, nadie puede dudar ya de las virtudes de este tipo de freno. Al fin y al cabo, le valió una meritoria quinta posición.