Las apuestas señalaban al Gran Premio de Cataluña como el escenario donde se confirmaría que Joan Mir subirá a MotoGP pilotando una Suzuki oficial por los dos próximos años, pero finalmente la marca japonesa se ha adelantado y ya ha hecho oficial el anuncio.
Joan Mir que apenas ha comenzado su andadura en Moto2 y ya lleva dos podios consecutivos realizará otro de esos ascensos meteóricos sin consolidarse en la categoría intermedia. Los intentos de su manager se han materializado finalmente, evitándose así la incertidumbre del cambio a los motores Triumph en Moto2 y colocándose al mismo ritmo de fichajes que los pilotos oficiales de la categoría máxima.
"Joan Mir es el talento que necesitamos en nuestro equipo"
Durante las dos próximas temporadas Mir va a pilotar la Suzuki GSX-RR junto a Álex Rins, otro piloto con un paso breve por Moto2 y que parece estarse adaptando cada vez mejor a la exigente MotoGP. Este año la Suzuki con concesiones está funcionando relativamente bien, pero los tres podios cosechados este 2018 (dos de Iannone y uno de Rins en mojado) están a punto de quitarles las concesiones para 2019.
Mir es el vigente Campeón del Mundo de Moto3, llega con garantías de éxito viendo su adaptación a Moto2 y está acostumbrado a entrenar con motos grandes. Además es un piloto corpulento, lo que le ayudará a domar la GSX-RR y parece un nuevo movimiento maestro de Suzuki quien apuesta por los talentos incipientes de manera regular. Viñales, Rins y ahora Mir.
Davide Brivio pondrá bajo su tutela al desembarco de uno de los rookies más prometedores de los últimos años que con sólo 20 años "reúne todas las características de los pilotos que queremos con nosotros", ha manifestado el italiano. "Tiene la mente muy clara. Sabemos que necesitará algún tiempo pero estamos convencidos de que tendremos un equipo fortísimo en el futuro".
Este movimiento de Mir parece haberse realizado de forma un tanto apresurada después de que Jorge Lorenzo hiciera saltar la banca con su anuncio de fichaje con Honda HRC y la obligatoria salida de Dani Pedrosa de la que ha sido su casa durante toda una vida. Ahora el mayor perjudicado es el propio Pedrosa quien parece haberse quedado ya de forma definitiva sin opciones de pilotar una moto oficial en 2019.