Michael Jordan es un friki de las motos. Está enamorado de las Suzuki, en su garaje tuvo una muy especial y casi llega a MotoGP

Los famosos tienen muchos hobbies. Y uno de los más molones que se podrían echar es el de las motos. ¿Quién no conoce a Michael Jordan? La leyenda de la NBA es un friki de las motos de época. Sus 1,98 metros de altura no le privan de disfrutar de las motos.

La ex superestrella de la NBA es un friki hasta el punto de que se va de tandas cuando puede. Y no solo eso, sino que ha estado a punto de comprar un equipo de MotoGP y otro del WSBK. Su espíritu motero quizá no sea tan grande como el de la pelota, pero ahí está.

A punto estuvo Michael Jordan de saltar al WSBK y MotoGP con su propio equipo

Hay facetas que uno nunca podría imaginarse o asociar. Porque si decimos "Michael Jordan" rápida y evidentemente, aficionados y no aficionados al mundo de la pelota lo asociarían al mundo del basket y la estrella de la NBA. Pero a veces hay que rascar un poco más para sorprender.

Michael Jordan es un verdadero fanático de las motos. Y eso es algo que la mayoría de gente desconoce. Y no es algo que le haya venido por la retirada de las canchas; su afición por las motos llegó en la juventud. Jordan ha dicho en multitud de ocasiones que lleva subido a una moto desde su infancia en Wilmington, Carolina del Norte. Allí también empezó su carrera en la NBA.

Hay historias muy molonas sobre Jordan y las motos. Como cuando un día revolucionó Chicago. Aún tapado con un casco, la silueta de Jordan es reconocible con sus llamativos 1'98 metros de altura. El caso es que circulaba con su Suzuki GSX-RR por las calles de Chicago cuando le reconocieron. Liadón.

De repente, a él se unieron una cantidad ingente de motociclistas que querían circular en moto con el "GOAT" (The Greatest of All Time). Desde este acontecimiento se vio obligado a disfrutar de la moto por las noches, siempre dijo.

Su último y definitivo retiro del mundo del basket en 2003 le acercaron todavía más a las motos. De hecho, reavivó su llama. Un encuentro fortuito mientras repostaba en una gasolinera con un piloto local, James Casmay, terminó con MJ involucrado en los circuitos. A partir de ahí decidió que quería vivir mucho más las motos.

Casmay llamó a un viejo conocido, Pete Mauhar, que era un veterano director de carreras de motos en las Superbikes yanquis. "Recibí una llamada preguntándome si queríamos ayudar a Michael Jordan a entrar en el mundo de las carreras. Sinceramente, pensé que algunos de mis amigos estaban vaciándome". Pero no. Esa fue su puerta de entrada a la competición.

Poco después nacía 'Michael Jordan Motorsports'. Y los movimientos fueron importantes. Hasta contrató al director creativo de Nike para sus propios monos de carreras de motos. El equipo no tardó en formarse nada. Y ahí estaban, de la mano de Yamaha, pintaron una YZF-R1 de azul y con el ya mítico logo de Jordan saltando con la pelota. Debutaron en 2004, unos meses después.

Al final de la temporada, Stewart había terminado en el puesto 35 en la categoría Supersport. Malos resultados. Pero la cosa no acabó ahí. Jordan quería algo más, y en 2005, la cosa mejoró. El equipo cambió la Yamaha por una Suzuki GSX-R1000 y ascendió a Superbikes.

Steve Rapp terminó la temporada en tercer lugar en la categoría Superstock y octavo en la categoría Superbike. En 2008 ganaron el primer título de Superstock. En Superbikes, la mejor posición fue un 4º puesto en 2007.

Pero el problema era el de siempre: un equipo privado luchando contra las fábricas. Ni sus relaciones comerciales eran suficientes. En 2010 empezó a ganar carreras en Superbike. Y en 2013, anunciaron el objetivo de entrar al WSBK e incluso MotoGP. Pero todo se truncó porque perdieron a un patrocinador clave, National Guard. Eso acabó con la ruina de Michael Jordan Motorsport.

Michael Jordan y Suzuki

Michael Jordan siempre profesó un amor especial por Suzuki. Al menos es la marca que eligió y con la que se asoció durante su periplo deportivo. Pero a nivel personal también tenía una Suzuki GSX-R1000. Es la moto con la que se le veía rara vez por la calle, pero también en circuito. Siempre trató de ser cauto en sus apariciones públicas encima de una moto.

De hecho, hace doce años salieron a subasta todas sus motos Suzuki. A día de hoy no se sabe con certeza qué motos tiene o deja de tener, y si a sus 61 años sigue montando.

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