Os acordáis de Vladimir, ¿verdad? El pobre hombre que daba con sus huesos, literalmente, contra un carnero un poco loco y no sólo en una ocasión sino que al menos en dos, según documentos gráficos adjuntos. Pero en esta, y en búsqueda de la tercera definitiva, cambiamos el punto de vista.
Porque aunque no podamos saber qué es lo que exactamente lo que se le pasa por la cabeza al carnero, si podremos ver exactamente su mismo punto de vista. Y yo sinceramente me quedo cuando al final sale como alma que lleva el diablo persiguiendo al endurero en zancadas de a cuatro patas. Si es que están locos estos bichos...
La pregunta es: ¿cómo habrán hecho para ponerle la cámara al carnero? Y, ¿cómo la habrán recuperado?
Gracias de nuevo Sebastian por hacernos llegar el vídeo.
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