Segundo día de la aventura. Esta mañana me he levantado a las 6 para llegar al Cap de Creus a la hora del amanecer, pero entre pitos y flautas he llegado cuando el sol ya estaba casi un palmo sobre el horizonte. Aun así he podido hacer alguna foto en condiciones. O eso me parece a mí. La zona es alucinante, casi como si hubieses sido trasladado a otro planeta donde en principio no ves a nadie, pero si te fijas un poco mas, van apareciendo los signos de que el hombre también está allí presente. Entre las fotos podéis observar las pequeñas calitas que hay alrededor y que esconden veleros fondeados o incluso algún chalet.
Una vez hecha la sesión fotográfica me he vuelto a Cadaqués para desayunar y ponerme de nuevo en ruta, esta vez hacia el oeste. Ayer os comenté que el GPS que llevo se empeñaba en meterme por autopista, pero hoy, tras cambiarle los criterios de búsqueda, se ha empeñado en meterme por carreteras de segundo y tercer orden. En estas, la Derbi se mueve con mucha soltura, cuesta arriba hay que jugar un poco con el cambio para mantener el motor en el régimen de potencia, entre las 8000 y las 9500 rpm. Pero cuesta abajo es donde sus suspensiones, y el chasis cumplen su trabajo a la perfección. A pesar de llevarme a mí y al equipaje encima no protesta en las curvas ni en las frenadas. El problema es que si tienes intención de hacer una cantidad de kilómetros para llegar a un sitio, estas vueltas y revueltas no son lo más indicado. A ver si mañana consigo llegar a un acuerdo entre el GPS y mis intenciones y el tema funciona de una vez por todas.
Con el motor entre las 8000 y las 9000 rpm nos movemos de 100 Km/h para arriba. Llaneando solo hay que llegar en quinta a los 100 Km/h, sobre las 9000 rpm, para meter sexta y mantener o incluso incrementar la velocidad hasta los 120 Km/h que he visto esta tarde en la N-240 camino de Barbastro. En autovía es necesario mantener el motor en esa franja de revoluciones para defenderte con los camiones. Aunque en algún momento hay que hacer el pillo y aprovechar la succión que dejan para subir la velocidad hasta superarlos. Esto es bastante peligroso y nada recomendable, por muchos kilómetros que lleves a la espalda siempre te puede sorprender el camionero con un adelantamiento inesperado y meterte en problemas. Los consumos de momento van bastante contenidos, rondando los 3,5 litros a los 100 Km en carreteras de montaña. Pero todavía no tengo todos los datos necesarios para confirmaros estas cifras.
Las fotos que os colgué ayer no tenían la calidad esperada, pero me vais a tener que perdonar porque hasta que vuelva a casa estoy limitado a un módem USB con poquito tráfico y aún menos velocidad. Pero en cuanto encuentre una conexión con las tragaderas suficiente os las arreglaré. Mientras disfrutad con las fotos de hoy, mañana más.
En Moto 22 | Las vacaciones de Moto 22, Derbi-Cadaqués