Ya no hace fata que tengas una Ducati Multistrada o una BMW HP4 para poder disfrutar de una suspensión semiactiva. Sólo necesitarás tener una Kawasaki ZX-10R (modelo 2011-2013) y podrás disfrutar de la última chuchería en amortiguadores que ha preparado Öhlins. Porque la última versión del TTX36 MkII ahora podrás comprarla con un sistema electrónico que regula el amortiguador de acuerdo a las necesidades del momento.
Aunque la idea es que este amortiguador sea instalable en cualquier moto, de momento sólo se puede usar en las Kawasaki ZX-10R porque esta moto y su centralita son las únicas que aceptan conectar la propia centralita del amortiguador a la red de la moto y así compartir datos para realizar los ajustes necesarios. Estos ajustes se realizan de manera automática, teniendo en cuenta el Öhlins la configuración de la moto y actuando en consecuencia. Los parámetros utilizados son varios, y van desde la manera en la que el piloto está dando gas las revoluciones del motor, la velocidad de las ruedas o incluso cómo se esté comportando el piloto en ese momento.
No es exactamente el sistema que ya conocemos de la Ducati Multistrada (por poner un ejemplo) pero se acerca bastante. Y todos los que hemos probado un sistema así nos bajamos de la moto pensando lo mismo ¿Cómo no han inventado algo así antes? Así que ya sabes si tienes una Kawasaki ZX-10R de última generación y 1.625 dólares (1.200 euros aproximadamente) ya puedes disfrutar de un Öhlins TTX36 MkII semiactivo. A ver si no tardan mucho en sacar la horquilla que se complemente con este amortiguador.
Vía | Motorcycle USA; Asphalt & Rubber