Estamos acostumbrados a descubrir patentes que las marcas registran en la sombra y que son diseños que se guardan bajo el ala por si en un futuro tienen algo de utilidad. Lo hemos visto tanto en Honda, como en Suzuki, Yamaha, BMW, Harley-Davidson y otras muchas marcas.
Ahora los compañeros de Bike Social han tenido acceso a una patente de Kawasaki de hace un año que muestra una moto que parece más salida de una película de ciencia ficción que de un modelo real que alguna vez podría ver la luz.
Kawasaki sigue queriendo cambiar el concepto de moto
Esta nueva patente de Kawasaki habla de una moto eléctrica a la que se le ha quitado el manillar. En su lugar utiliza unas barras fijas en las que se ubica tanto el acelerador como el freno, ambos en la mano izquierda.
Pero la novedad de esta moto que parece salida de la película 'Tron Legacy' no está solo en la ausencia del manillar. Si nos fijamos tanto en el eje delantero como en el trasero las ruedas son pivotantes y se inclinan más o menos en función de cuánto saque el cuerpo su piloto. También llama la atención que mientras en el eje delantero la rueda pivota hacia el lado en el que sobresale el motero, la rueda trasera no lleva la misma inclinación que la frontal, un planteamiento novedoso que permitiría girar la moto de una forma distinta a lo que estamos acostumbrados a ver.
Con esta idea de Kawasaki es lógico pensar que no lleve un motor de combustión para así evitarse el engorro de solucionar la cuestión de la transmisión. En su lugar los de Akashi optan por poner un motor eléctrico en cada rueda y en la parte central ahora se situaría la batería que alimentaría a los servomotores que se encargarían de gestionar las inclinaciones de las ruedas de los dos ejes.
Una duda que se nos plantea es cómo de fácil sería manejar una moto de este tipo, sobre todo a baja velocidad ya que al no tener manillar y funcionar en función del movimiento del piloto desconocemos si sería sencillo poder maniobrar en parado con ella. Imaginamos que ya rodando a cierta velocidad el manejo sería más intuitivo, pero con los pies en el suelo ¿tendríamos que inclinarnos igualmente o existiría otro sistema?
Esta moto nos recuerda a la J Concept que Kawasaki presentó en el Salón de Tokio en 2013. Una moto con cuatro ruedas donde las dos traseras se comportaban como una sola mientras que las del eje delantero podían funcionar de forma opuesta para que se pudiese inclinar en curva. Según la marca japonesa este prototipo ha marcado desde entonces la línea hacia donde podrían llegar sus futuras motos.
Quién sabe si esta imaginativa moto de la marca japonesa llegará a ver la luz o es una patente más que se queda en el olvido. Lo que está claro es que Kawasaki le está dando vueltas al concepto de lo que deberían ser las motos del futuro y por lo menos eso hay que agradecérselo.