Si hay un piloto en el que se centran todas las miradas al llegar al Gran Premio de Italia ese es, sin duda, Valentino Rossi. El veterano militante de Yamaha es siempre un candidato a todo cuando el Campeonato del Mundo de MotoGP se acerca al Autodromo del Mugello, pero este 2017 tanto el piloto como la afición se han tenido que conformar con un cuarto puesto en carrera con cierto regusto a triunfo, sorteando el malestar físico.
Valentino llegaba a Mugello con la intención de resarcirse de la decepción cosechada en el pasado Gran Premio de Francia con una caída poco merecida en la última vuelta mientras luchaba por la victoria contra Viñales y un cero en la carrera del año pasado en su casa. En cambio, el italiano se ha encontrado con un nuevo revés al tener que correr convaleciente del fuerte golpe sufrido mientras entrenaba motocross.
"Las 23 vueltas se me hicieron muy largas"
Tras un soberbio arranque en el que se ha puesto al frente de la prueba nada más apagarse el semáforo, Rossi ha plantado cara mientras su cuerpo se lo ha permitido. "Sabía que iba a ser una carrera más complicada de lo habitual. Me he sentido bien sobre la moto rodando bien y sin tener dolor, pero 23 vueltas se me han hecho largas", confesaba el italiano a quien aún le costaba algo de trabajo respirar.
Al final esto le ha ido pasando factura y aunque podía haber luchado por el podio aseguraba que "he hecho todo lo posible por mantenerme cerca de los pilotos de delante, pero al final de la carrera no tenía fuerzas para atacar a Petrucci". Aun así es un gran resultado, más aún teniendo en cuenta como el mismo Valentino afirma que "ha sido un fin de semana positivo, especialmente cuando el martes no sabía si iba a poder correr".
Sin embarco se adivina cierta decepción en sus palabras puesto que el Gran Premio de Italia siempre es una cita especialmente señalada en el calendario del Il Dottore. "Me habría encantado estar en el podio de Mugello pero no he podido hacer más de lo que he hecho. Poder correr en casa delante de tantos aficionados ha sido un regalo".
Ahora, y con sólo unos días hasta el próximo Gran Premio de Catalunya, Valentino tendrá que estar recuperado al 100% si quiere volver a meterse en la pugna por el campeonato. El italiano ocupa la tercera plaza en la clasificación general a 30 puntos de su compañero de equipo, Maverick Viñales.
Fotos | Movistar Yamaha MotoGP
En Motorpasión Moto | GP de Italia