Hace unos minutos que ha corrido la noticia de que Ben Spies se ha caído en los entrenamientos del GP de Indianápolis 2013 y según cuentan parece que estará de baja al menos otras tres o cuatro semanas. Atendiendo a las noticias que nos llegan desde el circuito norteamericano, Ben Spies se ha caído en la curva 4 del trazado dañándose el hombro izquierdo. Y lo que parecía que en un principio no tenía mucha importancia ha acabado confirmando que se ha dislocado el hombro izquierdo.
La nota de prensa dice que el piloto ha perdido el control de su Desmosedici a la salida de la curva 4 y ha sido lanzado "por orejas". Al caer se ha golpeado la clavícula izquierda, tras trasladarlo al centro médico del circuito le han detectado una dislocación acromio-clavicular en el hombro izquierdo. El nombre sólo ya hace daño de oírlo. De nuevo parece que estamos frente a otra víctima del control de tracción.
Este podría ser el último clavo del ataúd de Ben Spies en MotoGP, ya que el tejano, que llegó al Mundial con el título del Mundial de Superbike 2009 bajo el brazo no ha llegado a cumplir las expectativas que se había depositado en él. Para colmo, esta temporada, tras el GP de las Américas tuvo que ponerse en manos de los médicos porque su maltrecho hombro derecho le provocaba dolores tan intensos que incluso llegaban a sobrecargarle la espalda y el pecho, ya que en esas condiciones no se puede pilotar una MotoGP. De esta manera Ben Spies ha estado de baja desde abril de este año, y justo en la carrera en la que se reincorpora a su equipo sufre una fuerte caída que puede que lo mantenga en dique seco otro mes más.
Una pena que Ben Spies no haya podido demostrar todo su potencial en estos años. Parece que sigue vigente la maldición de que los pilotos de Superbike no triunfan en MotoGP.