Aleix Espargaró no va a ganar el mundial de MotoGP 2022. El piloto español perdió todas sus opciones en el Gran Premio de Malasia, después de otra gris carrera en la que tan solo acabó décimo, y eso gracias a que Franco Morbidelli fue sancionado después del banderazo a cuadros. Asia se ha tragado a la Aprilia.
Antes de comenzar la gira asiática Espargaró llegaba con las pilas cargadas, con un podio en Aragón que supo a victoria. Sin embargo, el piloto español solo ha sumado 18 puntos en las últimas cuatro carreras, y ni siquiera ha tenido oportunidades reales de estar en la batalla por los podios. Aprilia se despide del título.
Espargaró ha pasado del podio a terminar a 20 segundos de la cabeza
Es muy evidente que es la Aprilia la que se ha quedado por el camino en este tramo final de la temporada. La rompedora RS-GP 2022, que había sido la moto más prometedora de toda la temporada, se ha desfondado a la hora de la verdad. Entre Espargaró y Maverick Viñales no han pasado del séptimo puesto en la gira asiática.
"Yo piloto igual, Maverick igual, y la moto no funciona. No somos capaces de ser rápidos. Llevamos cuatro carreras en las que es muy difícil entrar entre los diez mejores", comentaba un frustrado Espargaró. La décima posición de Sepang le impide llegar a Valencia siquiera con alguna opción de título.
"Ganar el mundial era un sueño. Ha estado muy cerca, lo hemos luchado muchísimo, he dado todo lo que he tenido todo el año. Pero la verdad es que en la parte final no hemos estado a la altura, y lo que más me frustra es que no entiendo muy el por qué. No soy capaz de sacar conclusiones concretas", decía Espargaró.
Aprilia cambió el concepto de su moto de cara a la temporada 2020, y en circuitos como Motegi, Buriram, Phillip Island o Sepang no había carrera de MotoGP desde 2019, es decir, antes de la pandemia. Puede que a otras marcas los datos previos le hayan servido más que a una Aprilia que corrió en Asia con motos muy diferentes.
"Hemos estado muy cerca todo el año, a mí me habría gustado acabar en el mismo nivel, si no se podía ganar, acabar luchando por podios. Es increíble después del año que hemos hecho, llevemos varias carreras así. Hoy he acabado a 20 segundos... no lo sé. No puedo entenderlo", concluía Aleix Espargaró.
De cara a Valencia lo que le queda a Espargaró es luchar por la tercera posición del mundial de pilotos, lo cual no va a ser nada fácil. Enea Bastianini se colocó a solo un punto de él en Sepang.