Andrea Dovizioso dio la sorpresa el año pasado peleando el título del Campeonato del Mundo de MotoGP. Un invitado que nadie esperaba y que le puso las cosas muy difíciles a un Marc Márquez que, finalmente, se proclamó vencedor en la última carrera.
Los planes de Ducati no pasaban por el piloto de Forli para conseguir el ansiado mundial, sino por Jorge Lorenzo, pero sin duda las cosas han cambiado para esta temporada en la fábrica de Bolonia, que apuestan por este peculiar binomio moto-piloto italianos para conseguir la corona de la máxima categoría.
El sueño compartido de Ducati y de Dovizioso
Cuando va a comenzar su sexto año consecutivo en Ducati, Andrea Dovizioso puede conseguir su primer mundial en la categoría reina del motociclismo. Desde que llegó a MotoGP en 2008 nunca lo ha tenido tan cerca como ahora, tras quedar en segunda posición el año pasado.
Y es que 'Dovi' se ha convertido en un una pieza inesperada en la pelea por el título de campeón del mundo. El año pasado, por estas fechas, apenas entraba en las quinielas de favoritos, sobre todo con problemas por resolver en su montura con la que no estaba del todo satisfecho, en cambio ahora muchos lo ven como el único capaz de plantarle cara a Marc Márquez.
La progresión del piloto italiano es obvia, en su primera temporada con Ducati consiguió 140 puntos a final de año, siendo octavo y sin subir ni una sola vez al podio. Tampoco hizo ninguna pole, aunque eso ha demostrado que no tiene nada que ver, ya que este pasado 2017 tampoco fue ninguna vez el primero en parrilla.
En cambio sí subió el número de puntos hasta los 261 y fue subcampeón. Además subió un total de ocho veces al podio: ganó en el Gran Premio de Italia, en Cataluña, Austria, Gran Bretaña, Japón y la polémica carrera de Malasia con el 'mapping 8', también firmó una segunda plaza en Catar y un tercer puesto en San Marino.
El piloto de Forli sabe que este puede ser su año, con una pretemporada en la que se ha mantenido muy regular y en la que comentaba haber hecho los mejores test de su vida, lo que la temporada pasada parecía un sueño del que no despertar puede convertirse en una realidad.
Así, Dovizioso no sólo lograría su primer título de MotoGP, sino que volvería a poner a Ducati en lo más alto. La fábrica sólo tiene en su haber el título conseguido por Casey Stoner en 2007 pero, además, en este caso sería un premio muy especial al poder conseguirlo con la dupla de montura y piloto italianos, algo que trataron con Valentino Rossi pero que finalmente no resultó. Quizá el momento sea ahora.
Fotos | Ducati
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