Hay hallazgos que siempre sorprenden. Por ejemplo, ir al granero de tu abuelo y encontrarte con su vieja moto. ¿Quién pensaría que una moto de 1948 es una verdadera joya revalorizada? Pues algo así ha pasado con esta moto.
Solo te diremos que es una Vincent Black Shadow, y ahí donde la ves, es una de las motos más preciadas de la historia. Tanto que su precio puede rondar los 100.000 dólares. Y eso es un pasote para una moto con casi ocho décadas a la espalda.
Era la moto más rápida en su día, y casi hoy
Puede que no te suene, o puede que sí. Pero decir Vincent Black Shadow en el nombre de las dos ruedas debería hacerte erizar los pelos, como mínimo. Hablamos de que en 1948 Vincent creó la moto de producción más rápida del mundo. Y de hecho, aunque en pleno 2024 las hay más rápidas, sus cifras siguen siendo impresionantes.
Y para muestra, un dato: era capaz de marcarse un 0 a 100 kilómetros por hora en tan solo 4,5 segundos.
Esta bestia solo rompió barreras en términos de velocidad y potencia, sino que también estableció nuevos estándares en el mundo del motociclismo. Con un motor V-twin de 1.000 cc que generaba 55 CV, la Black Shadow alcanzaba velocidades superiores a los 200 km/h, convirtiéndose en la moto más rápida de su época.
Su diseño elegante, junto con innovaciones como el sistema de suspensión telescópica y los frenos de tambor de gran tamaño, capturó la imaginación de los entusiastas de las motos y contribuyó a su estatus legendario. Tan legendario que ahora hay gente pagando auténticos pastizales.
No es frecuente hallar una moto así en un granero, abandonada y tapada con una manta. Pero existen casos, y este es uno de ellos. Se trata de una Black Shadow Serie C de 1951 que se subasta, y que se encontró en un granero abandonada a su suerte; allí pasó gran parte de su vida... Y eso son muy buenas noticias para quien la vende (y para quien la compra) porque apenas ha sido utilizada.
Estuvo guardada en un lugar seco incluso antes de que pasara a manos de su actual propietario en 1988, y tiene pinta de que no ha pisado la carretera desde, por lo menos, los '70.
El propietario actual de la moto se pasó cinco años intentando que el anterior propietario se la vendiera, hasta que lo consiguió. Sabía que era una verdadera joya.
Es una moto que solo se produjo en una tirada de 1.744 ejemplares, y no se sabe cuántos andan circulando por ahí. Este es uno de ellos, y se subasta en un precio de entre 27.000 y 35.000 euros. Una de estas en buen estado puede llegar incluso a los 100.000 euros.