No sabemos qué tendrán las road races que nos resultan tan hipnóticas. Posiblemente sea su mezcla entre riesgo extremo, motos a toda velocidad y pilotos que para saber lo que significa la palabra peligro tienen que googlearlo.
Hoy te traemos una muestra más de este mundo paralelo de las carreras de motos, un mundo frenético en el que el respeto lo es todo. Allí, en las islas británicas y especialmente en la Isla de Man se sitúa la cuna de las carreras en carretera, desde donde sale este espectacular vídeo en el que no hay música, sólo una moto a toda velocidad por el trazado de La Montaña.
A cualquier cosa le llaman amateur en la Isla de Man
El de hoy no es uno de esos grandes nombres de las road races; se trata del piloto Andy Farrell, un piloto desconocido fuera de las fronteras del mundillo que se llevó la victoria en el pasado Manx Grand Prix dentro de la categoría Junior y segundo en Lightweight.
Esta carrera está destinada en cierto modo a los denominados como equipos amateur, aunque sinceramente no parece que amateur sea la definición apropiada para definir a un piloto que es capaz de volar a esa velocidad sobre el asfalto de la isla a lomos de una Kawasaki ZX-6R Ninja de 2015.
Doble bola extra con la North West 200
Ni bordillos, ni muros, ni farolas, ni árboles, ni lluvia... Nada impide a estos pilotos retorcer el mango como si fuera lo último que fueran a hacer con sus vidas, y el resultado son carreras tan espectaculares como la North West 200 donde en lugar de salir de uno en uno, la prueba se disputa con todos los pilotos saliendo a la vez.
Hay que tenerlos de un tipo de acero muy especial o ser muy inconsciente para lanzarse a correr de esta manera. Cada uno que elija la opción que quiera, pero yo creo que es una mezcla entre las dos.