Parece ser que no estamos en época de bonanza económica y hay que apretarse el cinturón un poco y por este motivo este año tenemos 300 euritos para darnos algún capricho estas navidades. La verdad es que siempre he pensado que no es más rico el que más tiene si no el que menos necesita y que las cosas tienen dos precios, el de la etiqueta en euros y luego otro que nosotros queramos dar. Una cosa muy barata puede sernos muy útil y darnos muchas satisfacciones, entonces aunque su precio de adquisición sea mínimo la rentabilidad será máxima.
Y viceversa, claro, algo muy caro puede convertirse después en el típico gadget que acaba lleno de polvo en el trastero, en un cajón o dentro del armario. Esto creo que nos ha pasado a todos, al menos yo reconozco que me he visto en ambas tesituras. También a la hora de regalar es muy típico el decir: ¿qué quieres?, ¿qué te hace falta?. Lo he oído muchas veces. Oído y preguntado pues cuando se regala siempre se quiere acertar con algo que guste, sea práctico y se de uso realmente. Así pues me voy a gastar con vosotros esos 300 euros pero ese presupuesto bien podría valer mucho más, o menos, dependiendo de las vivencias de cada uno.
Para empezar y por unos 130 euros en total nos vamos a comprar un objetivo para la cámara de fotos que tenemos. Hemos guardado algo de dinerillo todo este año pasado mes a mes y al final ha caído la ansiada réflex digital ahora que han bajado mucho de precio. Nos gusta mucho la fotografía y además, salidas en moto y cámara fotográfica siempre nos ha parecido una mezcla indivisible y que cuaja a la perfección. No por la técnica en sí, que nos llama mucho la atención, si no por que son los recuerdos gráficos de una vida que nos gusta tener.
Además sera curioso vernos dentro de unos años o enseñar nuestras fotos a la gente joven de entonces para que puedan ver las nuestras motos, nuestros trajes, etc. Seguro que nuestras monturas parecerán prehistóricas pero el espíritu de ir en moto seguirá siendo el mismo. Pues para tales menesteres, un objetivo 50 milímetros de focal fija muy luminoso nos vendrá de perlas. Para lo que suelen costar las lentes de cámaras fotográficas este no es muy caro y nos permitirá sobre todo hacer buenos retratos de nuestros amigos, o de nuestra moto. Eso sí, acompañado al menos de un filtro protector y un parasol. Todo se nos va a 130 euros, casi la mitad de nuestro presupuesto.
Y con la otra mitad pues nos vamos a permitir una salida invernal en moto muy especial con balneario incluido. Invierno es una época delicada para viajar en moto y más si se trata de alta montaña pero con precaución y si el tiempo nos lo permite se puede disfrutar igual que en cualquier otra estación del año. Bien equipados ponemos rumbo a nuestro destino que será exactamente en Andorra La Vella. Mientras tanto y durante la ruta ya podremos ir sacando rendimiento a la lente que acabamos de comprar tomando instantáneas en alguna de las paradas de la ruta.
Y ya llegamos al destino en el que tenemos reservado una entrada al balneario de Caldea en el que podremos relajarnos en sus espacios de aguas termales con jacuzzi, sauna e infinidad de baños de agua. Eso sí, ¡aquí no metas la cámara reflex para hacer fotos que las cámaras de fotos son gatunas o poco amigas del agua¡. No, la cámara y el equipo de cordura nos espera en la habitación del hotel que hemos reservado para pasar la noche y reposar tranquilamente. Esto nos costará 120 euros y el precio será para dos personas. Además incluye el desayuno del día siguiente. Y todavía nos quedan 50 euros con los que podemos cenar algo en un restaurante modesto o una pizzería por poner un ejemplo.
De esta manera nos gastamos nuestro presupuesto de 300 euros para este final de temporada esperando que las emociones superen con creces ese número con muchas más de 300 sonrisas cuando revisemos nuestras fotos en años venideros.
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Foto | Fotopedia