Casi me caigo de la silla cuando he visto este vídeo en el que nos explican (en ruso) la manera fácil y sencilla, para toda la familia que diría aquel, de fabricarnos una rueda de clavos para el hielo. Así, armados con un taladro de mano, unos cuantos kilos de tornillos, un poco de cinta americana y una cámara podremos salir a dar una vuelta sobre el hielo que está formándose en casi toda España.
En un principio pensaba que al ser una cubierta de tipo Tubeless (sin cámara) esta aguantaría sin muchos problemas la hermeticidad a la hora de montarla en una llanta. Claro que, conforme ves que nuestro amigo ruso sigue atornillando más y más tornillos, te entra la convicción de que el sistema no va a funcionar sin algo más. La solución parece que sea la cinta americana, pero tampoco. Una buena cámara cumple con su cometido y tenemos la rueda lista para funcionar.
He de reconocer que me habría gustado ver una demostración de cómo van esas ruedas de clavos, pero con algunos antecedentes de vídeos de esa parte del mundo, casi que mejor nos quedamos con las ganas y sólo lo imaginamos.