Desde hace 18 años, Honda ha estado presente en el Campeonato del Mundo de Superbike de la mano del mítico equipo Ten Kate Racing. Allí la marca nipona ha cosechado un total de 10 títulos mundiales (uno en Superbike y 9 en Supersport).
El Ten Kate Racing ha sido la forma en la que Honda se ha mantenido en el Campeonato del Mundo de Superbike con poco esfuerzo. La marca japonesa nunca quiso destinar una partida importante de presupuesto al campeonato mundial de motos derivadas de serie y lo dejó en manos de la estructura que dirige Ronald Ten Kate.
El Ten Kate llevará a Honda a los tribunales
Como única aportación de la marca, la estructura recibía las Honda CBR1000RR Fireblade teniendo que desarrollarlas el propio equipo para ponerlas a punto para el Campeonato del Mundo de Superbike.
Parecía que eso iba a cambiar en 2019. El mes de abril la marca japonesa realizó una visita al Ten Kate Racing en su taller en Nieuwleusen donde según ha comentado Ten Kate prometieron una mayor implicación con el equipo para 2019: "Una visita de los representantes de HRC en abril dejó claro que, después de muchos años, el equipo ya no sería el único responsable del desarrollo de motores, chasis y electrónica, y que la asistencia técnica vendría de parte de fábrica".
La noticia bomba vino durante el pasado EICMA cuando HRC anunció su mayor implicación en Superbike, pero con Moriwaki en la parte técnica y el Althea Racing en la parte logística. Lo que dejaba fuera al Ten Kate Racing del futuro de Honda en el Campeonato del Mundo de Superbike.
Semanas después Ronald Ten Kate ha roto su silencio. El propietario del equipo ha contado los problemas a los que se enfrenta a día de hoy su escuadra: tras dar soporte a Honda en el Campeonato del Mundo de Superbike durante 18 años, la marca nipona ha decidido recientemente no seguir dotando de material al equipo holandés.
Según ha comentado Ronald Ten Kate, durante la última prueba del campeonato de motos derivadas de serie celebrada el 27 de octubre en Catar, entre HRC y el equipo seguía habiendo la misma relación de trabajo que siempre. Además, habían tomado ya algunas decisiones importantes con la marca nipona de cara a la próxima temporada en la visita de los representantes de Honda al equipo en la que se comprometieron a apoyar con más fuerza el proyecto. Nada hacía presagiar la noticia que desde la fábrica le harían llegar días más tarde.
A día de hoy, el Ten Kate Racing se ha declarado en bancarrota al retirarse del proyecto el apoyo de Honda sin previo aviso, la marca a la que han sido fieles desde su debut en el WSBK. Según ha comentado el propietario de la escuadra "el equipo continuará trabajando para competir a nivel de mundialista, con suerte para (parte de) la temporada 2019, pero de no poder ser así para 2020".
La ruptura entre Honda y el Ten Kate Racing ha estado lejos de ser amistosa, el propietario del equipo acusó a la firma nipona de haberles dado la noticia de su falta de apoyo tarde: "El Ten Kate Racing ha sido puesto en jaque mate por el vendedor de motos más grande el mundo (Honda)".
Esto es todo de momento ya que el siguiente capitulo de esta historia tendrá lugar lejos del asfalto: "Estamos a la espera de procedimientos legales relacionados con esta situación por lo que Ten Kate no hará más comentarios en este momento".