Una vez más quiero agradecer la atención prestada por el equipo de Pirelli al permitirnos mostrar todo el trabajo que desarrollan a lo largo del mundial de Superbikes y en concreto a Samuela Bracco y Kevin Allen por facilitarnos la labor para poder publicar este reportaje. También pudimos asistir a una charla con Giorgio Barbier responsable del departamento de Pirelli Racing en la que nos explicó todo el trabajo desarrollado por Pirelli y que año tras año se transforma en nuevo neumáticos con excelentes prestaciones que salen al mercado para que cualquier usuario pueda disfrutar de las mismas gomas que usan en competición.
Ya el año pasado nuestro compañero L.Font en un estupendo artículo nos contaba como es todo el proceso desde que llega el camión con los neumáticos al circuito, hasta que estos son enviados de nuevo a la fábrica para su destrucción y reciclaje. Pero en esta ocasión quiero centrarme en una parte del proceso que sigue realizándose de una manera manual por mucho que tiempo y tecnología avancen. Efectivamente, estoy pensando en el equilibrado de las ruedas.
Cada vez que tengo oportunidad de dar un paseo por el paddock de algún circuito, irremediablemente, si hay alguien equilibrando una rueda, me quedo embobado unos cuantos minutos preguntándome como son capaces de realizar esta tarea tan delicada para la conducción de una manera completamente manual con tanta precisión y en tan poco tiempo.
Y esta vez la oportunidad me la ponían en bandeja para resolver todas mis dudas y comprender de una vez por todas, que la fuerza de la gravedad es más precisa que cualquiera de las máquinas de equilibrado que podáis imaginar. Así, una vez que nos encontrábamos en el área de trabajo que Pirelli destina al montaje de los neumáticos de SBK me fui directo al técnico encargado del equilibrado.
Por supuesto según me explicaron el equilibrado de una rueda delantera es mucho más crítico por así decirlo que el de la rueda trasera, ya que en la trasera un mal equilibrado puede ser incómodo pero va a permitir al piloto aproximarse a la realización de buenos tiempos. Pero si la rueda delantera está mal equilibrada no hay nada que hacer y el resultado en el circuito seguro que no es bueno.
Y la primera cosa que aprendí es que el equilibrado de las ruedas comienza ya en el montaje. Este punto rojo que podéis ver en las fotos es el punto que en la propia fábrica se marca una vez hecho el neumático como punto más ligero del neumático. Por lo que el montador del neumático en la llanta deberá hacer coincidir este punto con la válvula, para compensar el peso de esta, con el menor peso del neumático.
También me sorprendió la habilidad que tiene el técnico de equilibrado en cuanto llega la llanta con la rueda montada para saber cual es el eje que tiene que poner. Ya que no todas las llantas tienen el mismo diámetro de eje. De hecho, estoy seguro que yo el único capaz de distinguir a la primera es el del monobrazo de la rueda trasera de la Ducati.
En principio el sistema en sí de equilibrado es sencillo. Una vez puesta la rueda con el eje en los soportes de la equilibradora estática, se trata de comprobar donde el conjunto llanta-neumático se queda abajo, así sabremos cual es el lado que más pesa, para a continuación poner peso en el punto contrario y así equilibrar el conjunto.
Pero precisamente es ahora donde viene el problema. ¿Cuanto peso poner? Os puedo asegurar que los técnicos de Pirelli pocas veces tienen que rectificar el peso que han puesto, siendo en contadas ocasiones y con pequeños trozos de los mal llamados plomos, ya que actualmente su componente principal suele ser Zinc, las veces que tienen que retocar el equilibrado.
Y todo este proceso se llega a realizar unas 2.500 veces durante un fin de semana de carreras.
En Motorpasión Moto | Superbikes Valencia 2010: Pirelli en el mundial de Superbikes.