Una pregunta rápida: Encima de la moto, ¿cuál es una de las partes que menos protegidas llevamos? Efectivamente, con lo que te sientas también, pero yo me estaba refiriendo concretamente al pecho, una parte bastante importante y que hasta hace poco los fabricantes de no incluían dentro de su catálogo de protecciones a nos ser que viniese unido a otras como los petos de motocross.
Con mi afición últimamente a rodar por el suelo (ya sabéis, hacer el bicho bola), empecé a plantearme seriamente comprar una de estas protecciones y así, finalmente, hace un par de semanas me hice con una Alpinestars Tech Chest Guard que he estrenado este fin de semana y del que os acerco la prueba.
Alpinestars Tech Chest Guard: Duro y grande, lo que todos deseamos
Como podéis ver en la foto, se trata de una protección en forma de placa con una zona más estrecha en la parte superior y más ancha en la parte inferior. A primera vista, parece que se debería colocar al revés pero nada más lejos de la realidad ya que entonces nos molestaría en los hombros.
Su interior es de fibra muy duro. Cuesta doblarla y se mantiene en todo momento muy rígida. Fue lo primero que me llamó la atención ya que me parecía demasiado grande y aparatosa como para colocar debajo del traje. En casa, la coloqué bajo una chaqueta de cuero e impedía que la chaqueta se amoldase al cuerpo, quedando bastante tirante en el frontal.
Sin embargo, como todas las protecciones, esta también está pensada para ser usada encima de la moto, no en casa y delante del espejo. Por ello, en cuanto nos ponemos a los mandos, la Alpinestars Tech Chest Guard deja de molestarnos ya que el propio movimiento de llevar los brazos hacia adelante aplana nuestro pecho, permitiendo que la protección asiente perfectamente sobre nosotros.
No dispone de ninguna tira para sujetarla al cuerpo pues está pensada para llevar debajo del traje por encima de la camiseta interior. Para evitar que se mueva, dispone de una banda de silicona por la parte interior (similar a la que podemos ver, por ejemplo, en las partes superiores de las medias), con la que se adhiere perfectamente. Además, otras dos bandas oblicuas por la parte exterior ejercen la misma función en este caso contra la chaqueta del traje de cuero.
Alpinestars Tech Chest Guard: ¿Funciona?
Pues hombre, el saber si una protección funciona o no es algo que siempre me ha dado un poco de, como decimos en el norte, miedín. Es como ser padre, una cuestión de Fé, ¿no?, porque han pasado test de choque pero a ver quien es el guapo que se cae para probarlo y ver si de verdad funciona. Pero bueno, es el modelo que usa Casey Stoner y por lo que hemos visto últimamente, parece que aparentemente funciona, jijijiji....
Dejando las bromas a un lado, lo que si os puedo decir es que en marcha no molesta absolutamente nada ya que apenas se siente. Por descontado, tampoco se descoloca y acordaros que yo practico supermotard y e ir ahí encima es como subirse a un toro mecánico. Tampoco noté más calor con él y eso que este sábado fue uno de esos días en los que no hacía falta preparar la comida ya que los pájaros caían ya horneados en su punto.
Lógicamente Noss probó a darme unos golpecitos en el pecho, incluso con contundencia, y se notaba que disipaba el golpe por todo el frontal. Nuestra caja torácica es muy dura por lo que tan sólo con que la protección evite un impacto directo del manillar, por ejemplo, que tiene poca superficie y la disipe por todo lo ancho, evitará que nos hagamos daño. Lo que no tengo claro es si los golpes me los dio para probar la protección o para felicitarme por el por fuera con el que le deleité.
A medida que lo he ido usando, poco a poco ha ido perdiendo su forma completamente plana, amoldándose un poco a la forma de mi pecho por lo que entiendo que con el paso de los días todavía será más cómoda. Sobre todo se ha ido curvando en la parte inferior, rodeando un poco más las costillas y aumentando la protección en la zona lateral de la caja torácica.
Únicamente se comercializa en negro y existen dos tallas, una más orientada para niños y otra para adultos. El precio aproximado de venta al público es de unos 39 euros por lo que no es una protección excesivamente cara. Aunque sinceramente, ninguna protección me parecerá nunca cara, ¿no os parece?
Fotos | Alpinestars, Zimbio