Exageración desnuda en fibra de carbono y 208 CV: así es la nueva MV Agusta Brutale 1000 Serie Oro

Durante meses hemos estado especulando sobre una nueva moto procedente de Varese, un nuevo punto de inflexión en MV Agusta que recuperase la senda del éxito para la marca italiana y fuera un compendio de tecnología inédito en la marca. Y aquí está.

Es la MV Agusta Brutale 1000 Serie Oro, una moto que une lo mejor de sus vehículos mas exitosos con la buena fama comercial de las Brutale, la deportividad de sus F4 1000 y la más avanzada tecnología disponible, además de un diseño muy MV Agusta.

MV Agusta Brutale 1000 Serie Oro: 300 unidades para un nuevo comienzo

Aunque sea una moto completamente nueva es innegable que la MV Agusta Brutale 1000 Serie Oro es, eso, una Brutale. Los rasgos de diseño característicos de la naked italiana más radical siguen ahí con un depósito musculoso, colín de aspecto monoplaza, basculante monobrazo y faro ovalado con tecnología LED. Por detrás un nuevo colín de estilo Dragster se inaugura en la familia.

El estudio aerodinámico se ha tomado directamente de las motos de carreras de la firma italiana, así que además de carrocería, en la Brutale 1000 Serie Oro nos encontramos algo más. En los laterales del radiador apreciamos unos flaps laterales cuya misión es canalizar el aire y generar estabilidad a alta velocidad. Para reforzar su carácter ultradeportivo se prescinde de un manillar plano en favor de sendos semimanillares bajo la tija superior.

Siguiendo la tradición de la casa transalpina, la MV Agusta Brutale 1000 Serie Oro equipa un motor de cuatro cilindros derivado de la F4 RC, pero completamente nuevo. Esta moto se convierte por derecho propio en la naked más potente del mercado con una potencia de 208 CV a 13.450 rpm y 115,5 Nm de par motor que pueden mejorar aún más. Con la línea de escape de titanio de SC Project y una centralita específica sube hasta 212 CV a 13.600 rpm.

Las válvulas son de titanio y están dispuestas en posición radial y están accionadas por cadena central, sus guías son nuevas y la cámara de combustión está realizada mediante mecanizado. También se han ajustado los tiempos de admisión mientras que los pistones son nuevos, de baja compresión y con segmentos de baja fricción Asso y toda la línea de admisión con toberas TSS de altura variable es nueva.

Siguiendo con el cigüeñal, la MV Agusta Brutale 1000 Serie Oro utiliza uno completamente creado desde cero, con un nuevo equilibrado para reducir las vibraciones y al mismo tiempo evitar las pérdidas de potencia parásitas cuando gira en la zona alta del tacómetro.

La transmisión primaria sigue recibiendo novedades con un nuevo juego de engranajes de baja fricción cuyo efecto es una rumorosidad mecánica mucho menor y una precisión total, que se complementa con unas nuevas tapas del motor en fibra de carbono para atenuar el ruido. Esta obsesión por reducir la rumorosidad mecánica presente en las MV Agusta hasta ahora tiene un sentido y es que no cumpliría con las nuevas normativas de emisiones.

Acabando con el propulsor de cuatro cilindros, el remate lo pone una línea de escape 4-1-4 de aspecto amenazante cuyos cuatro extremos salen justo por la base del colín protegidos por unos masivos paracalores.

Y donde no llega la vista nos encontramos con una centralita desarrollada en colaboración con Eldor. Un cerebro digital que usa acelerador electrónico, plataforma de medición inercial, control de tracción de ocho niveles, antiwheelie, Launch Control o cambio semiautomático bidireccional entre su arsenal disponible.

El chasis parece el mismo de siempre, pero la MV Agusta Brutale 1000 Serie Oro utiliza un bastidor único con unas cotas revisadas. La estructura se confía a una combinación entre multitubular de acero delante y placas de aluminio detrás que sujeta un basculante de aluminio con una distancia entre ejes total de 1.432 mm, cortísima (una Ducati Panigale V4 R tiene 1.471 mm entre ejes).

Las suspensiones son de la más alta calidad con una horquilla invertida Öhlins sujeta por una masiva tija triple y un monoamortiguador trasero Öhlins TTX36, ambos controlados electrónicamente por un sistema de suspensión semiactiva.

Para el equipo de frenos se ha recurrido también a material pata negra con un conjunto de discos de 320 mm flotantes mordidos por pinzas de freno radiales monobloque Brembo Stylema. La gestión de la frenada se confía a un sistema Bosch ABS 9.1 con asistencia de frenada en curva.

Si antes decíamos que la fibra de carbono se había utilizado para atenuar el sonido, aún hay mas. Este noble material se emplea en la carrocería y también en las llantas para reducir el peso al mínimo, combinándose con una batería de iones de litio ligera y componentes realizados mediante CNC para dejar el peso final en 184 kg en seco.

Por el momento sólo se van a crear 300 unidades de la MV Agusta Brutale 1000 Serie Oro que vendrán con el escape SC Project y la ECU, a las que más tarde se unirán las Brutale 1000 a secas con materiales algo menos exclusivos y que deberían ayudar a MV Agusta a salir del pozo en el que se encuentran.

MV Agusta Brutale 1000 Serie Oro 2019 - Ficha técnica