Más de 4 años tardó Lightning en llevar su LS218 de la fase de preserie a la producción final, y ahora parece que han cogido carrerilla. La firma estadounidense acaba de presentar su secreto peor guardado: su segunda moto eléctrica, la Lightning Strike.
Con unos datos que no se separan demasiado de lo que la marca nos había prometido durante la fase de teaser, este segundo modelo será algo más razonable, menos radical, menos potente pero sobre todo será mucho más asequible que la LS-218 además de incorporar unos tiempos de recarga ajustados.
Lightning Strike 2019: la moto eléctrica deportiva razonable
Al igual que ocurre en la LS-218, la Lightning Strike será una moto eléctrica en la que los clientes podrán optar por elegir entre tres niveles de batería diferentes. El modelo de acceso emplea una batería de 10 kWh para ofrecer una autonomía de 112-160 km (autovía-ciudad respectivamente) pero también hay versión de 15 kWh con un rango de 170-240 km por recarga y una tercera de 20 kWh que puede alcanzar los 320 km de autonomía en uso urbano.
Obviamente los 12.998 dólares que prometieron no están asociados con la autonomía más elevada. La Lightning Strike partirá de esos 12.998 dólares en su versión normal y la versión Mid Range se va hasta los 16.998 dólares, mientras que la Strike Carbon Edition sube a 19.998 dólares.
De esta manera Lightning ha estado un poco haciendo trampas durante estos dos meses de teasers en los que nos prometía una autonomía superior a los 300 km por un precio de 12.998 dólares, pero bueno, tampoco vamos a crucificarlos por ser presa de esta época en la que lo que parece que lo único que cuenta es el hype.
En los tres casos la batería cuenta con un sistema de refrigeración líquida y el motor eléctrico de las versiones de 10 y 15 kWh cuenta con una potencia de 90 CV y 244 Nm (¡a lo loco con el par motor!). La versión más potente, la Carbon Edition produce 120 CV y la misma cifra de par motor.
Sobre los tiempos de recarga también había estado prometiendo bastante Lightning y encontramos que en las dos versiones más asequibles el cargador integrado es de 3,3 kW (6,6 kW en opción por 1.500 dólares extra), si queremos acceder a los prometedores cargadores de nivel 3 habrá que pagar otros 1.500 dólares más (3.000 en total), mientras que en la Carbon Edition el cargador es compatible con los niveles de recarga 1, 2 y 3.
- Nivel 1: 8 horas para una recarga completa en un enchufe de 110 V.
- Nivel 2: 2-3 horas en un enchufe J1772.
- Nivel 3: 35 minutos, más de 160 km en 20 minutos.
A nivel de diseño volvemos a encontrarnos con un lenguaje muy familiar. La LS-218 ha sentado cátedra en Lightning y está claro que los ingenieros no han querido distanciarse mucho del primer modelo para aprovechar su tirón y, en parte, lo que puedan abaratar los costes de producción.
Líneas afiladas por doquier y un resultado general bastante atractivo. Las formas han sido trabajadas en túnel de viento y según la marca han conseguido el conjunto más eficiente aerodinámicamente de todas las motos eléctricas del mercado.
Donde sí hay cambios es en la ergonomía y es que se ha optado por unas geometrías un tanto más conservadoras, más enfocada a un público en general que a uno que busque emociones fuertes en cada salida, notándose una postura de conducción más relajada y con la espalda notablemente más erguida.
En cuanto al equipamiento, de forma opcional se puede pedir con el Performance Package que aparece en las fotos que incluye suspensiones Öhlins en ambos ejes, frenos Brembo y un cuadro de mandos completamente digital de AIM Strada.
El peso volverá a ser una de las claves que condicionen dinámicamente a estos modelos y en orden de marcha Lightning apunta a 206 kg en seco para las motos con batería de 10 kWh, 210 kg para las de 15 kWh y 220 kg para las de 20 kWh.
Para hacerse con una habrá que desembolsar una reserva de 500 dólares para la Strike de acceso y 10.000 dólares por la Carbon Edition. Las primeras unidades deberían ser entregadas en julio de 2019 en Estados Unidos comenzando primero por entregar las Carbon Edition y con un plan de expansión internacional en camino.