Aunque Valentino Rossi sea uno de esos pilotos que trabajan para los domingos sin buscar tiempos rápidos durante las primeras sesiones, el Gran Premio de Argentina no ha comenzado de la mejor manera posible para el piloto italiano. Rossi acabó ayer décimo sexto mientras que Maverick Viñales, quien encabezó la tabla de tiempos, sigue dominando con rotundidad cada sesión.
A más de un segundo de su compañero de equipo y con la misma moto Rossi no se encuentra cómodo sobre su Yamaha YZR-M1 según aseguró anoche después de acabar la FP2. "Las sensaciones nos recuerdan a los entrenamientos de Catar" apuntaba el piloto.
"Nos faltan las buenas sensaciones"
Visiblemente consternado por no encontrar la puesta a punto adecuada para hacer trabajar la moto con fluidez, Rossi empieza a preocuparse por la falta de entendimiento con la montura sobre la que antes era siempre competitivo. "Tenemos muchos problemas en la entrada en curva y no me siento cómodo", subrayaba el italiano, alguien a quien le gusta especialmente frenar tarde y dejar correr la moto.
En realidad las distancias son relativas en Termas de Río Hondo por la particular configuración del trazado, "estoy un segundo por detrás pero el problema es que los rivales están muy fuerte. Tengo que mejorar mis sensaciones y la puesta a punto", concretaba, poniendo todas sus esperanzas en la FP3 de hoy para poderse meter entre los 10 primeros y evitar al máximo los problemas de la curva 1.
Veremos si durante las sesiones que quedan Il Dottore logra dar con la tecla apropiada y rendir en carrera igual que como lo hizo en el Gran Premio de Catar donde ni siquiera él apostaba por acabar dentro del podio tras unos entrenamientos bastante pobres.
Fotos | Yamaha MotoGP
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