El inicio de temporada de Marc Márquez en Losail podría pasar por malo. El piloto español fue incapaz de seguir el ritmo de su compañero de equipo, Pol Espargaró, y fue perdiendo posiciones hasta acabar en un insípido quinto puesto. Sabe a poco, pero Márquez dejó trazas de una nueva mentalidad que, desde ya, le acerca al título.
El piloto español reconoció después de la carrera que no pudo seguir el ritmo de Espargaró y prefirió conformarse con esa quinta posición. No fue un problema de físico, según sus propias palabras, simplemente el nuevo MotoGP es así. Y Márquez ya lo ha sumido para ganar un mundial más pero de otra manera.
Márquez le metió puntos a sus teóricos rivales por el título
"Físicamente he estado bien, eso es importante. Pero ha sido una carrera muy rápida, no me lo esperaba, así que me ha costado. El quinto puesto es un buen resultado en un circuito que siempre me ha costado. Es solo la primera carrera", explicaba un honesto Márquez al terminar la prueba. Los primeros once puntos ya están en el casillero.
El nuevo MotoGP es así. La igualdad es máxima y cualquier detalle cuenta. Un quinto puesto en una carrera cruzada es un tesoro, y eso es lo que consiguió Márquez en Losail. Aquellos mundiales con solo dos o tres pilotos en disposición de ganar las carreras ya pasaron a la historia. Las puntuaciones estratosféricas terminaron en la era de la igualdad.
Y el planteamiento de Márquez, desde los entrenamientos, ya fue el de maximizar cada detalle. En la clasificación cogió las ruedas de Joan Mir y Pecco Bagnaia para meterse en la primera fila de la parrilla. "El rebufo nos ha dado esas dos décimas extra", reconocía. Sin ellas, en vez de salir tercero hubiese salido décimo.
En una época en la que adelantar en MotoGP es muy difícil (Márquez no hizo ningún adelantamiento en carrera), la posición de parrilla es clave. Y Márquez aprovechó la candidez de sus supuestos rivales para colocarse de forma artificial en una posición en la que quizá no le tocaba estar. La diferencia entre un campeón y un gran campeón, lo que es Márquez.
Además, Márquez también ha crecido en las salidas, algo que ya mostró en 2021 y que volvió a plasmar en Losail. De no ser por la portentosa arrancada de Espargaró, el octocampeón se hubiese puesto primero. "Hoy había cuatro pilotos más rápidos que nosotros, pero hemos recogido puntos para el campeonato", concluía Márquez.
Con todo el respeto para Enea Bastianini, Brad Binder y los hermanos Espargaró, a priori ninguno de ellos debería ser rival de Márquez en el mundial. Esos acabaron por detrás (Joan Mir sexto y Fabio Quartararo noveno), o en el suelo (Pecco Bagnaia y Jorge Martín). Así que sí, Márquez fue, a su manera, ganador en Losail. Y pone camino al título.
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