Cuando empecé a leer no sabía si reír o echarme a llorar. Resulta que tres “jóvenes” robaron el scooter que utiliza Marc Márquez para desplazarse por el paddock… cuando éste estaba celebrando su segundo campeonato del mundo. De chiste, como aquel ladrón que tuvo la genial idea de apropiarse de la bolsa de deporte de un velocista y salir corriendo. Una acción que no hace más que reflejar la cruda realidad de los Grandes Premios de motociclismo.
Estos tres personajes fueron detenidos antes de salir del circuito, me imagino al trío subido al scooter discutiendo:
- ¡Te dije que cogieras la Motojepé!
- Nano, ¡qué a esto le metemos un Yasuni y flipas!
Aparte de lo anecdótico, como decía, este es el día a día de los GP. Decenas de motos de alta cilindrada son robadas durante las semanas anteriores por toda la península para luego ser reventadas ante el griterio del ebrio personal. Y es que en el pasado GP de Valencia la Guardia Civil tuvo que intervenir hasta en 500 ocasiones deteniendo a una docena de personas: cuatro por altercados, dos por robar una moto, otros dos por superar la tasa de alcoholemia, uno por conducir sin permiso y los tres protagonistas de hoy.
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