Una vez más me he puesto en contacto con la Señora que barre el box del Repsol Honda Team de MotoGP para ver cómo va todo antes de que comience la temporada y pese a que muchos de vosotros cuando os conté ya hace casi un año una de mis conversaciones con la Señora que barre el box de Repsol, me recomendasteis que no abandonara la medicación. Pero como acostumbro, he vuelto a hacer caso omiso de los consejos y creo que de nuevo empiezo a notar sus efectos.
A diferencia del año pasado he encontrado a la Señora tranquila, sin preocupaciones, es más, yo diría que incluso se encuentra eufórica. De nuevo he vuelto a ver esa chispa en sus ojos y ese tono en su voz que hace presagiar algo bueno. Parece como si no le importara que con tantas motos y gente pasando por el box este quede como una “leonera”. Con el trabajo que lleva dejarlo de nuevo todo impoluto.
Dice la Señora que limpia el box de Repsol que está encantada con el nuevo. Razón tenían sus compañeras de trabajo de otros box cuando ya hace casi un año solo le contaban las alabanzas del jovenzuelo. No solo el muchacho es limpio y ordenado como pocos, sino que además es tan “campechano” que siempre que la ve barriendo el box le dirige unas palabras. Aunque sea un simple buenos días, cosa que aunque no lo creáis no está acostumbrada. Hay muchos por allí para los que ella es una persona invisible, como si no estuviera. ¿Será que solo se hablan con personas de su nivel? Se pregunta muchas veces.
Ahora, al que sigue teniendo entre ceja y ceja es al padre del de Cervera, sigue diciendo que lo deja todo revuelto con esos nervios que se le ponen y que no para de morderse la uñas. Solo pide para esta temporada, el joven no se caiga mucho, para que su padre se ponga lo menos nervioso posible y así le dé menos trabajo.
No podía dejar pasar la oportunidad de preguntarle por Pedrosa. Sé que en el pasado ha tenido una relación bastante tensa con él. Le ha cogido mucho cariño, pero ella está allí para limpiar y los últimos años han sido muy duros. Dani no hacía más que traer las motos rotas, ensuciándolo todo. A punto estuvo de estallar y llamarle la atención de tanto aceite que limpiaba. Sin embargo a finales del año pasado y en esta pretemporada, parece que haya hecho borrón y cuenta nueva olvidándose del pasado. Ahora, ella sabe que pese a los años que llevan juntos con esta relación ensucia/limpia, en cuanto tenga otra racha de las malas y más ahora comparándolo con su limpio y pulcro compañero, las cosas se pueden poner entre ellos bastante feas.
Incluso me comenta que está un poco harta de limpiar trofeos de constructores que dejan medio abandonados en las estanterías sin hacerles el menor caso y que no hacen más que coger polvo.
Por lo menos si alguien se fijara en el trofeo de constructores del año pasado vería como luce mi trabajo y que siempre tengo la vitrina sin una sola mancha.
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