Aleix Espargaró no tuvo una carrera demasiado productiva en Buriram. El piloto español sufrió durante todo el fin de semana, no pudo ni siquiera pasar la Q1 y en carrera se ha tenido que conformar con una insuficiente undécima posición. Eso sí, sigue metido de lleno en la batalla por el mundial de MotoGP.
El momento más polémico de la carrera fue cuando Espargaró recibió una 'Long Lap Penalty' después de un toque con Brad Binder en la primera vuelta. El piloto español de Aprilia no se queja de haber sido penalizado, pero sí de lo injustas que son las variaciones de las sanciones según el circuito.
Espargaró cree que hubiese sido sexto sin el error
Espargaró fue claramente culpable del incidente en el que tocó a Binder. El piloto de Aprilia se llevó por delante al de KTM en la entrada de una curva, obligando a Binder a salirse de la pista. En Dirección de Carrera decidieron castigar a Espargaró con una 'Long Lap Penalty', pero el problema es que en el circuito de Buriram es especialmente larga.
"La 'Long Lap Penalty' aquí parecía una excursión al campo. He perdido casi cinco segundos. Está muy bien que hagan una 'Long Lap Penalty' en un circuito de un segundo y en otro de cinco segundos, está todo muy bien organizado", aseguraba un Espargaró que no podía ocultar su ironía tras la carrera.
Se refería probablemente a la sanción que tuvo que cumplir Fabio Quartararo en Silverstone después de tirarle a él en Assen. Por entonces el piloto de Yamaha tuvo una 'Long Lap Penalty' de las más cortas que hay en todo el mundial, perdiendo poco más de un segundo. Espargaró cedió más de cuatro por la misma sanción.
Eso sí, Espargaró se reconoce culpable del golpe con Binder: "Lástima del toque con Brad. Realmente he frenado yo por dentro, él ha cerrado mucho la línea, se veía muy poco al inicio de la carrera, y ha sido una pena el toque. He perdido mucho tiempo", aseguraba. Lo mejor es que tras ser decimosexto y undécimo en las últimas carreras, sigue en la pelea.
Espargaró se colocó en Tailandia a solo 20 puntos de Fabio Quartararo, que sigue siendo el líder del mundial. Es decir, está a menos de una carrera cuando solo quedan tres en juego. Veremos cómo se adapta Phillip Island a la Aprilia, pero incluso con el prototipo desfasado de 2019 las sensaciones fueron buenas.
"He recuperado lo que he podido. Creo que esos cuatro o cinco segundos era para hacer sexto, pero aun así nos vamos a 20 puntos del líder, así que ni tan mal", concluía un Espargaró que además dañó el ala delantera en el golpe. El de Aprilia sigue aguantando como un coloso y va a llegar muy vivo a la zona caliente del mundial de MotoGP 2022.