Ha tenido lugar en el hospital de Vall d''Hebrón, e Isidre con sus palabras ha dado una auténtica demostración de fuerza tanto física como mental, superación personal, y filosofía de vida. No le da cabida a los lamentos, sólo se la da al agradecimiento por seguir entre nosotros, y al trabajo para seguir mejorándose.
Isidre ya ha empezado a hacer algunos planes de futuro. Se ha propuesto como objetivo acercar a España la fundación Wings for Life, que investiga en el campo de la médula espinal y tiene mucho que ver con ese chip estimulador que se le implantó al piloto en la columna.
Se le ha preguntado sobre la posibilidad de que algún día vuelva al Dakar, participando en la categoría de coches. No lo descarta, y admite que le encantaría, pero de momento sólo tiene en la cabeza seguir trabajando duro para rehabilitarse en la medida de lo posible. Para ello seguirá hasta agosto en el hospital, para luego continuar con la recuperación en el instituto Guttman.
Estas son algunas de sus declaraciones:
Igual no puedo hacer lo mismo que hacía, pero sí otras cosas [...] Había vivido momentos duros durante las carreras, pero cuando vi que me caí, supe que me había hecho daño de verdad. Necesitas unos días para asumir la nueva situación [...] Mi lesión es medular al cien por cien. Tengo muchísima suerte; mi cabeza está bien, también mis brazos. Me he dado cuenta de que puedo hacer de todo. El mundo no se ha acabado; mi vida simplemente es diferente, se trata de cuando vaya por la calle, la gente me mire un poco más abajo [...] Estoy seguro de que no podré correr en moto, pero puedo hacer mil cosas en silla de ruedas. Ahora empieza algo nuevo y tengo mucha ilusión en ello [...] La vida es un regalo, que la disfrutas como puedes. Estoy muy motivado con todo lo que tengo que hacer a partir de ahora
Felicidades Isidre, y mucha suerte.
Vía | El País