Este medio día ha tenido lugar en la Casa del Lector del Matadero de Madrid la presentación oficial de la YZR-M1 del Movistar Yamaha MotoGP. Es la segunda de un equipo del Campeonato del Mundo de MotoGP que se lleva a cabo tras la de Ducati la semana pasada.
Esta temporada 2018 el objetivo no es otro que el de ganar el campeonato, tanto a nivel individual como el de constructores, y así lo han querido recalcar todos los que han participado en la presentación, tanto los dos pilotos oficiales Valentino Rossi y Maverick Viñales, como el nuevo presidente de Yamaha Racing Kouichi Tsuji y el director del Movistar Yamaha MotoGP Massimo Meregalli.
Rossi y Viñales presentan sus candidaturas al título
Lo más destacable que muestra la nueva Yamaha YZR-M1 es el cambio de color de su patrocinador principal Movistar que deja el verde para pasar al blanco, haciendo así contraste con el azul eléctrico de la montura. En cuanto al peso de la moto será de 157 kilos y podrá alcanzar velocidades de más de 350 kilómetros por hora.
Sobre la temporada en el mundial el objetivo es claro: ganar el título con alguno de sus dos pilotos y también el de constructores. El máximo responsable Kouichi Tsuji cree que "ambos tienen un gran talento" y serán "capaces de conseguir victorias para hacerse con el título". Además, asegura, "todas las personas involucradas en el proyecto (técnicos, ingenieros, sponsors...) trabajarán para ayudarles a conseguir su propósito" y superar así los problemas que tuvieron durante 2017.
Precisamente de esos contratiempos con la electrónica y los neumáticos ha hablado Massimo Meregalli que ha reconocido que estos próximos test les servirán para probar "las evoluciones en las que han ido trabajando durante el invierno", ya que hasta ahora no las han podido tener listas. También ha admitido que para el nuevo circuito de Tailandia "aprovecharán la información que les puedan aportar" desde el equipo de Superbikes de Yamaha, ya que ellos "ya han podido rodar allí" al contrario que las MotoGP.
En cuanto a los pilotos tanto Valentino Rossi como Maverick Viñales se encuentran "en estupenda forma física física y mental" como el propio Meregalli comentó, lo que es algo fundamental para pelear por el objetivo del año. Ambos han pasado todo el invierno entrenando y preparándose para este nuevo reto de 2018.
En el caso del piloto italiano sí que ha reconocido que aunque seguirá este año entrenando en su rancho "bajará un poco la intensidad" para no volver a hacerse daño como el año pasado. También ha señalado que este año espera que "tanto él como el equipo estén al máximo nivel", cosa que "no ocurrió el año pasado". Además ha manifestado que su experiencia le dice que los test de pretemporada son claves para saber "por dónde van a ir las cosas el resto del año" por lo que se los va a tomar muy en serio.
Por su parte Maverick Viñales, además de anunciar su renovación, ha dicho que tiene este este 2018 tiene "la misma presión que el año pasado", porque a pesar de ser su segundo año en Yamaha esa exigencia se la genera él mismo y trabaja mejor teniéndola. Sí ha reconocido estar "más motivado y con más ganas" de luchar por el título y se muestra contento por haber podido reconocer cuáles eran sus puntos débiles de cara a trabajarlos este año y así poder "no ir sólo rápido", sino sabiendo "qué funciona y qué no para ganar".