Un comunicado de Turismoto ha desatado la euforia entre los aficionados a las concentraciones moteras: Pingüinos volverá a Valladolid en 2017, en la antigua hípica militar. La vuelta del popular festejo, a falta de concretar detalles con las instituciones, ha sido la principal consecuencia de la Asamblea General Ordinaria y Extraordinaria del famoso motoclub.
La otra gran consecuencia ha sido la expulsión del que fuera su presidente, Mariano Parellada, además de su esposa María Teresa García y su hermano Pedro Parellada. Unas expulsiones ratificadas tras recogerse en sus respectivos expedientes disciplinarios la comisión de más de una decena de faltas graves contra los socios y el club.
Los tribunales repusieron a José Manuel Navas como tesorero de Turismoto, que ha explicado que ahora son seis los socios con responsabilidad y más de cien los socios colaboradores. También ha contado que no se han aprobado las cuentas de los últimos años, y ha acusado a los expulsados de haberse saltado las normas y haber actuado como si el club fuese su cortijo privado.
Burocracia y controversias
En lo que al retorno de la concentración se refiere, Navas ha recalcado la máxima ilusión por recuperar el espíritu de Pingüinos, si bien ha reconocido que será necesario realizar mejoras en la Hípica, mostrando su plena disposición para reanudar un festejo que se vio paralizado durante dos años por los problemas con la directiva y las protestas de los ecologistas. El tesorero lo tiene claro:
En dos semanas a más tardar, queremos un acercamiento con el ayuntamiento vallisoletano para ir concretando detalles y comenzar a realizar los trámites y negociaciones necesarias para que la concentración vuelva a convertirse en un referente de los moteros.
Por delante, medio año de líos burocráticos, permisos y seguro que un buen puñado de controversias. Pero se puede confirmar: después de la polémica suspensión de 2015, Pingüinos está de vuelta.
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